Los aditivos son una parte primordial de los lubricantes y de los combustibles. El uso adicional de aditivos Liqui Moly en tu combustible bencinero, permite mejorar la calidad y desempeño del combustible, y ayuda a corregir problemas de funcionamiento. Por esta razón, hablamos de vitaminas y medicamentos para tu vehículo.
Los aditivos pueden tener un enfoque preventivo y/o correctivo. El enfoque preventivo indica que pueden ser utilizados en vehículos desde 0 kilómetros para mantener el óptimo desempeño del motor y alargar su vida útil. El enfoque correctivo, es utilizado para cuando se presenta alguna falla que podemos corregir mediante el uso de aditivos en particular.
A continuación, te presentamos parte de nuestra gama de aditivos para combustible bencina:
DFI Cleaner
Moderno aditivo con tecnología de polieteraminas (PEA) para vehículos con inyección directa. Gracias al uso de PEA activas alcanza efectos limpiadores
máximos en el sistema de combustible y una excelente limpieza de pistones y de la cámara de combustión. Reduce claramente el riesgo de daños en el motor
debidos al pre-encendido a baja velocidad (LSPI). Recomendado usar preventivamente cada 5.000 kilómetros. 120 ml son suficiente hasta 50 litros de
combustible.
Injection Reiniger
Aditivo para todo tipo de vehículos bencineros. Elimina los depósitos de las válvulas de inyección, las válvulas de entrada, las bujías y la cámara de combustión y evita que se vuelvan a formar. Protege todo el sistema de combustible frente a la corrosión. Optimiza el rendimiento del motor, y reduce el consumo de combustible y emisiones de gases contaminantes. Recomendado usar preventivamente cada 2.000 kilómetros. 300 ml son suficiente hasta 70 litros de combustible.
Catalytic-System Cleaner
Aditivo que protege el catalizador contra obstrucciones de hollín. Limpia las válvulas de admisión y la cámara de combustión. Mejora la combustión del combustible.
Evita la corrosión en el sistema de combustible. Reduce el consumo de combustible y las emisiones de gases contaminantes. Recomendado usar preventivamente en el estanque de combustible cada 5.000 kilómetros o correctivamente pulverizándolo en la admisión (ver ficha técnica para más detalles).
Benzin-stabilisator
Aditivo estabilizador de combustible que conserva y protege el combustible frente al envejecimiento y la oxidación, aumentando la seguridad de funcionamiento.
Apropiado para el uso permanente en motores de uso esporádico. Evita la corrosión en todo el sistema de combustible. Apto para motores de gasolina de 2 y 4 tiempos.
Dosificación de 25 ml por cada 5 litros de combustible.
Octane Plus
Aditivo aumentador de octanaje. Es una combinación de sustancias activas formulada según los conocimientos más actuales sobre la tecnología de aditivos y combustibles. Octane Plus es de uso universal y aumenta el octanaje (RON) del combustible en entre 2 y 4 puntos. Gracias al aumento de rendimiento del combustible, se evitan daños del motor causados por detonación no controlada. Recomendado usarlo de forma preventiva en cada llenado de combustible si es necesario.
Speed Tec Benzin
Moderno aditivo para combustible especialmente desarrollado para mejorar y suavizar la aceleración y la toma de gas en régimen de carga parcial. Más placer de conducción gracias al incremento de la potencia. El motor arranca con más facilidad y va más suave. Apto para motores de 2 y 4 tiempos. Recomendado usarlo de forma preventiva en cada llenado de combustible si es necesario. 250 ml son suficiente hasta 70 litros de combustible.
Lead Substitute
Aditivo sustituto de plomo que lubrica y protege los asientos de válvula de vehículos que originalmente necesitan combustible con plomo. Reduce el desgaste de la culata y, por lo tanto, mantiene una compresión óptima. Evita los daños del motor y aumenta la seguridad de funcionamiento. Uso preventivo cada vez que se requiera. Dosificación de 25 ml por cada 25 litros de combustible.
MTX Vergaser-Reiniger
Aditivo limpia carburadores que aumenta el rendimiento del motor. Elimina los depósitos en el carburador, las válvulas, las bujías y la cámara de combustión y evita que se vuelvan a formar. Ahorra combustible. Mejora la compresión. Protege todo el sistema de combustible frente a la corrosión. Evita la congelación del carburador. Reduce el consumo de combustible y emisiones de gases contaminantes. Recomendado usar preventivamente cada 2.000 kilómetros. 300 ml son suficiente hasta 70 litros de combustible.